Sin embargo, aclara que jamás ha estado a favor del aborto, el matrimonio entre personas del mismo sexo con derecho a la adopción
México.- Benjamín Medrano Quezada pasará a la historia como el primer alcalde abiertamente gay del país, cuando asuma la Presidencia Municipal de Fresnillo, Zacatecas.
En entrevista para el periódico El Universal, el político postulado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) enfatiza que jamás ha escondido su orientación sexual. “Nunca lo he negado, todo mundo lo sabe y siempre lo han sabido”.
El alcalde electo de Fresnillo reitera “la hombría no se lleva entre las piernas, sino en la inteligencia y en la propuesta”.
Originario de una familia de 11 hermanos y de escasos recursos, Medrano Quezada estudió derecho, se dedicó a la música amenizando fiestas, fue migrante en Estados Unidos, abrió un antro para la comunidad homosexual y ha ocupado diversos puestos en la administración pública.
El exgobernador Ricardo Monreal (hoy diputado federal) lo invitó a participar en la política zacatecana y ahora gobernará el municipio más grande de su estado, habitado por más de 230 mil personas.
El alcalde electo de Fresnillo reitera "la hombría no se lleva entre las piernas, sino en la inteligencia y en la propuesta".
El nuevo alcalde zacatecano, nacido en Nochistlán, refirió que en 1998 se unió al movimiento monrealista, cuando el Partido de la Revolución Democrática (PRD) ganó la gubernatura y continuó en la administración pública local durante el mandato de la exgobernadora Amalia García.
Trabajó en la administración municipal de David Monreal en Fresnillo (2007-2010) y después se postuló por el Partido del Trabajo (PT) para una diputación local que ganó; sin embargo, rompió con los Monreal cuando se le presionó para denostar en tribuna al actual gobernador, Miguel Alonso.
Como no aceptó, en el PT se le negó la posibilidad de contender por una diputación federal, por lo que Medrano decidió ser abanderado del PRI para ganarle a Saúl Monreal.
El próximo alcalde de Fresnillo se dice católico, augura que tras asumir el poder, ratificará “ser un hombre de resultados”, critica a quienes consideran la homosexualidad como una enfermedad y odia a los “gay de clóset”.
Sin embargo, aclara que jamás ha estado a favor del aborto, el travestismo y la prostitución homosexual, así como el matrimonio entre personas del mismo sexo y la adopción homoparental.
“Nuestra idiosincrasia no lo permite, porque no estamos preparado para ello. No porque no tengamos la capacidad de hacerlo, pero no podemos ir tampoco contra las doctrinas y las costumbres”, dejó claro el político al diario El Universal.