Betty Monroe, quien aún está casada pero lleva meses separada, tiene libertad para buscar otras relaciones, dijo la actriz, cuestionada sobre su situación sentimental.
"Siempre he dicho que soy una persona que está casada, pero que tengo permiso del marido para salir con alguien más. Llegamos a ese acuerdo: él puede salir con quien quiera y yo tengo derecho de salir con quien yo quiera", expresó ayer.
Sin embargo, más que molestarse por el hecho de que una revista asegurara que sale con el empresario tapatío Alejandro Castillo, lo que lamenta es la forma en que se expuso el hecho.
"A mí lo que me molesta es la forma y los encabezados que utilizan este tipo de revistas, que son como de seudoperiodistas, porque ni siquiera averiguan bien las notas y lo único que hacen es dañar a las familias de terceros que no tienen nada que ver, arriesgan personas poniendo encabezados como 'millonario' y 'el marido es rico'".
Tras casi nueve años de matrimonio con Jamil Hindi, con quien procreó a Jamil y Elías, de 8 y 6 años, respectivamente, Monroe aceptó su relación con Castillo, con quien sale desde hace meses.
"La situación real es que el señor está separado, yo estoy separada y nos estamos conociendo. No es que tengamos un gran romance en puerta", aseguró.
"(Le afectó) Mucho (a Castillo), porque aparte exponen a su ex mujer, siendo una persona fuera del medio. Eso hace que tenga problemas. Sí se asustó, y ahorita creo que está con su familia arreglando los asuntos que le provocó esto: más broncas, pero bueno, cada uno sabrá, porque tampoco se puede ocultar algo cuando eres una persona pública, y yo lo soy".
Monroe, quien visitó Guadalajara para promover una marca de productos de belleza elaborados con aceite de avestruz, no tomará acciones contra la revista porque dice que no tiene nada que esconder.
"Siempre he sido muy honesta, nunca he ocultado quién soy ni con quién estoy. Simplemente hay cosas con las que no estoy de acuerdo, como encabezados que dañen a terceros; es una estupidez, se me hace muy mala leche de la revista.
"Me da risa, a veces me enoja, a veces me da muchas ganas de llorar, pero luego digo 'ay, las cosas caen por su propio peso'. Sí, no soy la mejor mujer del mundo; sí, no soy la mujer más sana, pero tampoco soy lo que están diciendo ni tampoco soy una pecadora, como lo están suponiendo muchas de las personas".
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